Había pasado el día trotando con sus pensamientos, sin detenerse especialmente en ninguno. Ponía el cebo de manera mecánica, primero abría la lombriz, después la partía en pedacitos que ensartaba y ataba con sedal al anzuelo para, finalmente, lanzar la caña con fuerza. El carrete producía un sonido metálico al desenrollarse. Después volvía a tararear imágenes en su cabeza.
Apenas sintió el primer tirón supo que era grande, le dejó sedal para evitar que se rompiera, el hilo se hundió rápidamente en el agua y aprovechó para afincarse con las botas en el lodo. Enrolló despacio la caña hasta que sintió el peso del pez y dio un fuerte tirón, el animal saltó del agua mostrándose. Era el más grande que había visto.
Estuvieron luchando durante dos largas horas, ambos esperaban lo mismo, que el otro se agotara, que se rindiera. Sin embargo, la lucha era desigual en sus comienzos pues el pez lo hacía por su vida y el hombre no. El pez cedió.
Lo cogió entre sus manos y sacó la mitad de su cuerpo del agua, era un hermoso ejemplar. Sin duda el más bonito que había visto nunca. Tenía el cuchillo en la cercana orilla, el pez boqueaba por el esfuerzo y la falta de aire, pesaba. Pesaba mucho.
Arrastró el pez a la orilla y cogió el cuchillo, soportó el peso con un solo brazo y el pez se movió a punto de quebrarlo pero el hombre aguantó. Decidido, asestó un certero tajo cortando el sedal, después arrojó el cuchillo. Introdujo su mano en la boca y le quitó el anzuelo.
Un hermoso ejemplar.
El hombre lo dejó ir acariciándole el lomo sabiendo que ese pez jamás volvería a ser pescado pues los peces aprenden, igual que los toros.
Siempre que contaba esta historia en los bares de pescadores terminaban preguntándole lo mismo.
¿Por qué?
Y él siempre daba la misma contestación. Pesaba demasiado.
viernes, 27 de agosto de 2010
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Translate
El otro
El otro me enseña de mi. En realidad no veo al otro. Me veo en el otro.
Etiquetas
- relato (60)
- reflexiones (32)
- poesia (31)
- divagaciones (11)
- humor (10)
- cuento (8)
- foto relato (8)
- relato del mundial (8)
- barrio infierno (6)
- vitrinas (5)
- musica (3)
- erotico (1)
- erotico; relato; (1)
Cosas que me gustan
-
Dime, ¿qué harías por amor? Bueno, no amo igual a mi perro que a mi pareja, a mis plantas que a mi caballo, a mis hijas que a mis amigos. ...
-
Dime, ¿por qué dialogamos? Por extendernos en el diálogo. Es decir, hablamos y construimos un mundo de palabras por donde caminamos juntos....
-
Dime, ¿cuando sueñas, hay otros en tu sueño? Nunca. Todo lo que sueño lo crea mi mente. No hay otros. Entonces: ¿todos eres tú? Sí. Bien...
-
Dime, ¿cómo puedes saber cuando te engañas a ti mismo? Puedo saberlo por la incongruencia de mi pensamiento, palabra y acción. Y dime, ¿c...
-
Y tras la oscuridad que supone acabar el día, sin más por hacer, con la tarea acabada y los dioses dormidos, toca la penumbra de la vida, la...
-
A la rata —explicó el Nini— no se la puede envenenar, pues entonces no se la puede comer y si te la comes andarás con cagalera tres días con...
-
Lo que realmente restringe el buceo con aire comprimido es la narcosis de nitrógeno o borrachera de las profundidades, limitando la profundi...
-
ACTO PRIMERO: El miedo. Dime, cuando tienes miedo ¿Qué temes? Enfermar, sufrir, al dolor, morir… Todo ello está relacionado con el cuerpo. ...
-
—Les he llamado porque ya tengo los resultados de las pruebas del chico. La madre, visiblemente angustiada, coge de la mano al hombre qu...
-
Aterrizó de cuclillas y el impacto logró que gimiera. Dirigió su mirada a la coronación del muro franqueado pero al estar oscuro no distingu...
Lo que más os gusta
-
Estaba distraído jugando a pintar de colores un árbol. Era premeditado. Te disfrazaré de arco iris —pensó— serás la envidia del bosque, ún...
-
Para quien no conozca el Savoy, os diré que es uno de esos sitios donde tu madre no dejaría que fueras aunque te bañaras en agua bendita y...
-
Elly sol í a contarme un curioso cuento sobre gorriones. Acostumbraba a llevar un delantal sobre medias de fantas í a y tacones muy altos ...
-
A la rata —explicó el Nini— no se la puede envenenar, pues entonces no se la puede comer y si te la comes andarás con cagalera tres días con...
Elije lo que quieras creer. Pero recuerda:
las creencias NO son hechos. 🎈
Mundo dormitorio
Y aquello?
Oh! Es mundo dormitorio.
Y qué hacen?
Allí todo el mundo duerme.
Qué maravilla, no?
No creas. Tienen sueños horribles la mayoría del tiempo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario